Enamorado del latido de mi corazón.
De los golpes furiosos contra mi pecho.
Y tu cabeza sobre mi pecho.
Ansias incontrolables de volverte a ver.
De revivir tu pelo envolviendo mi cuerpo,
Rozando delicadamente mi frente al besar tu cuello.
Suave y terso recorrido a través del placentero camino del deseo.
Y susurrarte al oído…
Declararte mi amor y mi fragilidad,
Dibujando un halo de cosquilleo alrededor de tus sentidos.
Y que me mires, y sonrías…
Que bajes el rostro escondiéndote entre las sombras…
Para luego emerger con una nueva mirada y sonrisa fugaz.
Destello de mi vida.
¿Sientes mi dulce melodía delatora?
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
3 comentarios:
Y oculta en la premisa de una fugaz despedida, espero tu regreso sin que aún te hayas ido.
Emerges de los más inacabado de mis sentimientos, de mis promesas, de mi debil sentir exasperado. Y es que me queda tanto aún por entregarte que inicio esta historia solo con una sonrisa... y la termino con mi cuerpo entre tus brazos.
Y desde la frialdad de esta noche me escondo en tus besos. Me quema la sensación de profundo deseo, cegándonos en el compás de nuetros latidos, inquietos, incontrolables.
Te amo Andrés.
Te amo más que todo lo que amo.
...
P.D.: si, la vi. =P
frío
mi pelo huele a ti.
es el día perfecto, salvo que ya no estás.
mi refugio del fin de semana serán Cortázar y Almodóvar. Así atenúo un poco la sensación de vacío con la que me voy quedando.
Te amo.
Publicar un comentario